lunes, 1 de mayo de 2017
Las espadas continúan en lo más alto en LaLiga
Entramos en el último suspiro de la competición, sólo restan tres jornadas, y nada cambia por arriba. Las únicas novedades se sucedieron en la cola, donde Osasuna y Granada ya son equipos de la Liga 1/2/3.
Una semana más el Madrid salvó los muebles en el último suspiro, está vez merced a un golazo de Marcelo a cinco minutos de la conclusión y poco después de haber logrado el Valencia el empate. Fue un encuentro jugado a ráfagas, con buenos momentos de los de Zidane y otros no tanto. Vamos, como siempre. Comienza fuerte y luego se deja llevar. Cuando se ve con el agua al cuello aprieta de nuevo y la fortuna, junto a la calidad de sus jugadores, le salva de perder puntos y quién sabe si de algo más. Ahora la pregunta que todos nos hacemos es si no pagará estas desconexiones ante rivales y competiciones más importantes. En LaLiga por el momento le vale para seguir ganando y acercándose al título. Su rival más directo, el Barcelona, sufrió ante el Espanyol en un derbi igualado que se decantó para los culés gracias a dos flagrantes errores de la defensa espanyolista. Suárez no perdonó y Luis Enrique pudo respirar con calma una semana más. Quedan tres jornadas y las espadas continúan en todo los alto aunque el Madrid cuenta con un encuentro menos, ante el Celta, que disputará el 17 de mayo.
Hizo los deberes con suficiencia el Atlético, que aplastó a Las Palmas en el Insular y vuelve así a meter presión al Sevilla. Los de Simeone solventaron el choque en menos de veinte minutos con tres goles para después relajarse y pensar en el Real Madrid y en la Champions. Mientras, los canarios continúan inmersos en una especie de sueño de los justos desde que Setién anunció que no iba a continuar en el banquillo la próxima campaña justo cuando alcanzaron la permanencia matemática. Desde luego el ambiente en las islas no es el más adecuado para jugar al fútbol y todos están deseando que la temporada finalice. El pasotismo se ha instalado en el equipo, desde el cuerpo técnico hasta los futbolistas, y la imagen que ofrecen no es precisamente la mejor.
Tres conjuntos mantienen una dura pugna por una plaza directa en la Europa League (a expensas del resultado de la Copa porque si la gana el Barcelona lo tres estarán en Europa) y los tres sacaron adelante sus choques. Fue muy fácil para el Villarreal, que apenas sufrió para derrotar al Sporting y de paso dejarle con un pie en la Liga 1/2/3. Parece que los de Escribá han llegado al final en un buen estado de forma como así lo indican sus últimos resultados, aunque la próxima semana tendrán un duro escollo en el Camp Nou. También cumplió con creces el Athlétic, que aplastó en Balaídos a un Celta con suplentes y con la mente en su eliminatoria frente al Manchester United que comienza esta semana. Por su parte, la Real Sociedad, aunque con más problemas de los esperados, derrotó a un Granada que con ese resultado decía adiós a la categoría de forma matemática. La derrota fue prácticamente una anécdota para los andaluces, que ya contaban con el descenso después de una campaña nefasta por cometer multitudes de errores, desde la planificación de la plantilla hasta la indiferencia de los directivos pasando por el constante cambio de entrenadores. Desde luego, se veía venir la pérdida de categoría como así ha sucedido.
Tenía una buena oportunidad el Deportivo de solventar sus problemas clasificatorios y dejar lista la permanencia pero falló en Pamplona. Aunque llegó a dar la vuelta al encuentro mediada la segunda mitad, al final debió conformarse con un empate que, no obstante, le permite respirar con tranquilidad porque el Sporting perdió. Osasuna, a pesar de su destino, lo intentó hasta el último minuto y estuvo a punto de conseguir el objetivo de la victoria pero no pudo ser. Al final los jugadores rojillos tuvieron el detalle de dar las gracias con una pancarta en el centro del campo a sus seguidores que, no obstante, aplaudieron el esfuerzo de sus jugadores y de un equipo que no tenía potencial para permanecer en LaLiga. A punto estuvo el Leganés de sacar algún punto de Ipurúa, aunque el Éibar tuvo más puntería y se llevó el triunfo. La mala suerte se cebó en los 'pepineros', que vieron cómo Lejeune sacaba un balón de cabeza bajo los palos y un disparo se estrellaba en el poste de la meta de Joel. No obstante, el conjunto de Garitano continúa con seis puntos de ventaja sobre el Sporting.
Por otra parte, el Alavés clavó un estoque en el cuerpo del Betis en el mismo Villamarín. Comenzaron los béticos poniéndose por delante pero en la segunda mitad se dejaron llevar y cayeron goleados por un Alavés que jugó con los suplentes. Bronca en el estadio bético y ya veremos el futuro de Víctor porque aunque tiene contrato podría dejar su puesto a finales de mayo. Hay muchos nervios y muchos asuntos pendientes en el Betis como para pensar en fútbol. Para el Alavés, un día más en la oficina a pesar de dejar a los teóricos titulares fuera. La segunda unidad se bastó para golear a un rival desquiciado.
Esta noche finaliza esta jornada en La Rosaleda con el derbi entre el Málaga y el Sevilla. Se la juegan los de Sampaoli, que deben ganar para no alejarse del Atlético mientras que el Málaga llega en el mejor momento de la campaña, con cuatro victorias en cinco partidos. Habrá nervios y tensión. Esperemos que también fútbol.
Concluyen diez días intensos de fútbol y ahora nos centramos en las semifinales de la Champions League con el derbi madrileño. El fútbol no para.
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