Sufrió pero el Barcelona consiguió mantenerse invicto una jornada más. El Madrid demostró que se ha ido de LaLiga a la vez que el Atlético se aferra a la segunda plaza. El Deportivo, en caída libre mientras esta noche Las Palmas y Málaga se la juegan a una carta.
No hay quien pueda, al menos por ahora, con el Barcelona. Bajo el diluvio universal y en campo enemigo fue capaz de sacar un punto casi peleado y mantenerse invicto. Cuando peor se le ponían las cosas, con un gol en contra, con el césped como una piscina y ante un rival que no cedía un milímetro, el conjunto de Valverde sacó fuerzas de flaqueza y consiguió, a balón parado, igualar el encuentro gracias a un cabezazo de Piqué. Por tanto, otro punto más a pesar de no realizar un buen partido y con muchos cambios y rotaciones en el once inicial. Lo peor, las discusiones entre Piqué y Gerard y después alguna que otra tangana en la que se vieron implicados casi todos los jugadores. El derbi estaba calentito aunque al final triunfó la deportividad y todos se retiraron sin problemas. Una jornada más el Barcelona salva los muebles y mantiene las distancias, a pesar de que Messi vio casi 60 minutos desde el banquillo.
El Atlético asegura la segunda plaza después de dejar en la cuneta al Valencia en un choque muy igualado. Un golazo de Correa (en la foto varios jugadores tras marcar) le dio los puntos y le aleja de sus rivales, además de recortar dos puntos al líder. Buen encuentro de los colchoneros, que han recuperado su fortaleza defensiva aunque ayer perdió a dos hombres por lesión como Savic y Godin. Para el Valencia, frenazo que le deja un poco más cerca del Madrid. Ha perdido regularidad y parece que la Copa le está pasando factura en cuanto a cansancio físico y mental.
Mientras, y a sólo nueve días del partido de Champions ante el PSG, el Real Madrid sigue dando motivos de preocupación. Ante un Levante muy inferior técnicamente y con ventaja en el marcador por dos veces, los de Zidane se dejaron empatar y a punto estuvieron de tirar incluso el punto. Bale se fue al banquillo después de realizar un partido lamentable y diez minutos antes del final Cristiano siguió sus pasos de muy mala gana. El problema es que luego su equipo encajó el tanto del empate. Pero el partido del portugués fue casi tan malo como el de Bale y el cambio fue más que oportuno. Lo que deja el encuentro es que siempre juegan los mismos y esto desmotiva a los suplentes, que cuando entran en el campo no tienen confianza porque saben que volverán al banco una semana después. Mal panorama el que se le presenta al Madrid y donde se ha comenzado a ver a un Zidane muy ‘tocado’ y preocupado. La Champions es su clavo ardiendo y a ella se aferra, pero se puede quemar. Por cierto, magnífico partido del Levante, que nunca se entregó y que incluso buscó la victoria en los minutos finales.
Otro que salió escaldado fue el Sevilla, inmisericordemente goleado en Ipurúa por un Éibar lanzado y arrollador. No fue nunca rival y la goleada puede considerarse como justa. Montella no hace funcionar a su equipo en LaLiga aunque esté obteniendo buenos resultados en Copa y esta semana pueda conseguir el pase a la final si elimina al Leganés. Frenazo del Villarreal, que perdió en su visita al Betis. La expulsión de Bonera en la primera mitad fue clave porque los amarillos surfrieron el acoso del conjunto hispalense y de su delantero Loren. El joven canterano debutó como titular y fue capaz de marcar los dos goles -el primero después de un tiro fantástico desde fuera del área- y dar la victoria a su equipo. También respiró la Real Sociedad, que aplastó literalmente a un Deportivo romo, negado y hundido. Rompe así una mala dinámica que le había enviado a la zona baja de la tabla. Eusebio respira, lo que ya no puede hacer su rival el viernes, Cristóbal, que ha sido cesado por sus malos resultados. Vamos a ver si el tercer inquilino del banquillo gallego este año (ya fue cesado también Pepe Mel) consigue sacar al Deportivo a flote. Precisamente lo que está consiguiendo Abelardo en el Alavés, que desde su llegada está lanzado. El sábado fue capaz de derrotar a un Celta que llegaba en buen momento pero que tuvo que hincar la rodilla. Poco a poco, como las hormigas, los vitorianos siguen dando pasitos hacia la salvación.
Además, Getafe y Leganés empataron a cero en un encuentro disputado bajo la nieve y la lluvia, con mucho frío, y con pocas ocasiones de gol aunque los ‘azulones’ estrellaron dos balones en los postes. Al final, reparto de puntos. También el Girona dejó patente una tarde más que ha llagado a LaLiga con ganas. Ganó casi sin despeinarse a un pobre Athletic, que nunca entró en juego y que no tuvo ninguna oportunidad. El debut de Iñigo Martínez con la camiseta bilbaína pasó desapercibido.
Dejamos para esta noche el último encuentro de la jornada, decisivo de cara al descenso: Las Palmas-Málaga. Ambos han realizado múltiples fichajes en el mes de enero y se lo juegan prácticamente todo a una carta. Como ha dicho Paco, el empate no le sirva a ninguno y, por otra parte, el que salga derrotado puede ir casi haciendo las maletas para viajar a la Liga 123.
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